En 2015, cuando Donald K. Anthony Jr. nos concedió una entrevista para lo que entonces era TouchéLatino, nos recibió —literalmente— en movimiento. Mientras conducía hacia una reunión, hablaba con pasión sobre sus sueños: democratizar la esgrima, hacerla accesible, contar sus historias, y lograr que cada niño que viera un sable por primera vez sintiera que también podía empuñarlo.
Hoy, una década después, ese mismo hombre acaba de ser nombrado Miembro de Honor de USA Fencing, el máximo reconocimiento que otorga la federación estadounidense a quienes dejan una huella profunda en el deporte.
Un líder que transformó la esgrima estadounidense
Donald K. Anthony Jr. fue presidente y presidente de la Junta Directiva de USA Fencing entre 2012 y 2020, período durante el cual la organización atravesó una de sus etapas más sólidas en materia de recuperación financiera, crecimiento estratégico y apertura hacia la diversidad.
Bajo su liderazgo, USA Fencing pasó de la incertidumbre a la estabilidad, recuperando la confianza del Comité Olímpico y Paralímpico de Estados Unidos. Desde la presidencia, Anthony impulsó programas de inclusión que abrieron las puertas del deporte a comunidades antes invisibles, y representó al país en el Comité Ejecutivo de la Federación Internacional de Esgrima (FIE).
Pero si hay algo que distingue a Donald Anthony, es que nunca se limitó al rol institucional. Es atleta, entrenador, ingeniero, empresario y soñador. Fundó SwordSport LLC para promover la esgrima a través de medios y eventos, y fue cofundador de la Peter Westbrook Foundation, organización que durante más de 25 años ha cambiado la vida de cientos de jóvenes en situación vulnerable a través de la esgrima.
Como atleta, representó a Estados Unidos en varios Campeonatos Mundiales de Veteranos, conquistando una medalla de plata en el Mundial de Poreč 2010, y aún continúa activo como entrenador principal del equipo de la Universidad Estatal de Ohio, donde combina la enseñanza deportiva con la formación humana.
Un reconocimiento con alma olímpica
El título de Miembro de Honor es una distinción relativamente nueva en USA Fencing, inspirada en la tradición olímpica de rendir homenaje a quienes, con su servicio voluntario, marcan generaciones. La distinción fue creada en julio de 2024 y se otorga, por política, solo dos veces al año.
El primer homenajeado fue Donald Alperstein, expresidente de la federación y referente legal y ético de la comunidad esgrimística estadounidense. Hoy, Donald K. Anthony Jr. se convierte en el segundo en recibir este honor, con una votación unánime de la Junta Directiva: 11–0.
“Don’s leadership has left an enduring mark on every corner of USA Fencing”, dijo Phil Andrews, CEO de la organización. “Desde fortalecer nuestra base financiera hasta ampliar el acceso y las oportunidades, su visión ayudó a posicionar a nuestra organización para un éxito a largo plazo”.
Un sueño que sigue en pie
Cuando le preguntamos en 2015 cómo se veía en el futuro, Donald respondió con la serenidad de quien tiene un propósito claro:
“Siempre estaré impulsando aquello que contribuya al progreso de la esgrima. Quiero ver una esgrima accesible para todos los jóvenes del mundo, sin importar su origen o condición. Ese es mi compromiso, y emplearé lo mejor de mí mismo para lograrlo”.
Hoy, al recibir este nuevo reconocimiento, esa promesa parece haberse cumplido —y al mismo tiempo renovado—. Porque su legado no es solo el de un dirigente, sino el de un hombre que creyó, desde niño, que los héroes con máscara y espada también podían cambiar el mundo.
Además de su labor institucional, Anthony ha apoyado proyectos que promueven la difusión y el fortalecimiento de la esgrima panamericana, entre ellos TouchéWorld, al que ha brindado su confianza y respaldo desde sus primeras etapas, reconociendo su papel en la promoción de la comunidad internacional de esgrima y sus atletas.
¡Felicitaciones, Donald K. Anthony Jr.!
TouchéWorld se une al homenaje, celebrando no solo al líder y al atleta, sino al ser humano que sigue defendiendo, con pasión y propósito, los valores más nobles de nuestro deporte.
Por: Calú Pargas Gabaldón.– CEO/Fundador – Touché Editorial.











