Tenía que ser en una final llena de emociones y que se decidió en muerte súbita. Así, el equipo de Hungría se hizo con la medalla de oro en la espada masculina ante Japón, 52 años después de la última dorada conseguida en Juegos Olímpicos, que se remonta a la edición de Múnich 1972.
El equipo conformado por Mate Koch, Gergely Siklosi, Tibor Andrasfi y David Nagy tuvo una batalla épica con Japón, el número uno del mundo, según la FIE. Por los asiáticos, la plantilla estuvo integrada por el medallista dorado Koki Kano, además de Akira Komata, Masaru Yamada y Kazuyasu Minobe.
Los europeos mantuvieron una ventaja máxima de tres puntos durante casi todo el combate hasta el séptimo turno. Akira Komata llegó a estar arriba 4-1 llevando a Japón al frente por primera vez ante Mate Koch.
David Nagy recuperó la ventaja perdida en el octavo turno ante Masaru Yamada, dejando la escena servida para el último parcial. El dorado Koki Kano, quien también estuvo en el equipo japonés que ganó oro en Tokyo 2020, se enfrentó a Gergely Siklosi y entre ambos ofrecieron un cierre de película.
Siklosi se puso al frente por un toque faltando menos de 10 segundos para culminar el combate, pero Kano lo empató de forma sensacional faltando seis. En la muerte súbita, el húngaro inició un ataque que terminó en punto a favor y desató la felicidad en su equipo.
En la batalla por el tercer puesto, Chequia sorprendió al sacar del podio a Francia luego de vencerlos 43 por 41. Los europeos, sextos en el ranking FIE, dejaron por fuera a los segundos de ese listado y actuales subcampeones del Campeonato Mundial.
Hungría dominó la esgrima hace más de medio siglo
La victoria de los europeos tiene un valor especial para una de las mejores escuelas del mundo. La última vez que Hungría fue campeón de unos Juegos Olímpicos en la prueba de espada por equipo fue en Múnich 1972.
El equipo que participó en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 estuvo a punto de romper esa sequía, pero Francia se lo impidió. Pero pasó mucho tiempo para que los húngaros volvieran a copas la escena como en los años 60.
Los húngaros fueron campeones de los Juegos Olímpicos de Tokyo 1964 al ganarle a Italia y, cuatro años después, en México, repitieron el logro al superar a la Unión Soviética. El triplete lo consiguieron en 1972 en Múnich, cuando derrotaron a Suiza.
En todas esas consecuciones destacó la figura de Győző Kulcsár, el único espadista que conformó los tres equipos dorados. Esta leyenda también fue oro individual en México 68, además de ganar tres Campeonatos Mundiales por equipo.
Venezuela cierra en el séptimo puesto
Una Venezuela con el sello del apellido Limardo, cerró en la séptima casilla en la prueba de espada por quipos, luego de ganar un combate ante Egipto. Como nota curiosa, de los cuatro integrantes del team, tres son hermanos, Jesús, Francisco y el campeón olímpico, Rubén.
Los venezolanos, séptimos del ranking FIE, iniciaron perdiendo ante Japón con un apretado 39-33, que fue más parejo de lo que dice el resultado, Luego perdieron ante Italia, cuartos del mundo, por 45-34, para cerrar triunfando ante Egipto 41-35.