El equipo de Corea del Sur salió decidido a hacerse con el oro en la modalidad de sable, para ello tenía que derrotar a otro de los favoritos, Hungría. La cuarteta asiática no solo se quedó con la dorada al ganar 45-41, sino que también se anexó su tercer sol en las últimas cuatro ediciones de los Juegos Olímpicos.
El dato abruma. La escuela de esgrima coreana se consolida entre las mejores del mundo con un equipo que ha dominado la escena. Se desquitaron de la derrota sufrida ante Hungría en el Campeonato Mundial de Milán en 2023, también ratificaron el oro conseguido en Tokyo 2020.
Sanguk Oh, ganador del oro en la prueba individual, encabezó al team surcoreano. Gu Bon-Gil, ahora triple campeón olímpico, además de Gyenongdong Do y Sangwon Park completaron la cuarteta histórica.
Del otro lado estuvo Hungría, su verdugo en el Campeonato Mundial, con su leyenda Aaron Szilagyi. También configuraron el equipo Krisztian Rabb y Andras Szatmari, quien junto a Szilagyi derrotaron a Corea la última vez que se vieron en tierras italianas.
La final fue muy pareja, pero con Corea del Sur siempre arriba sin tomar mayor ventaja. El climax del combate llegó en el sexto turno, cuando Andras Szatmari se fue arriba por dos puntos ante Sanguk Oh, colocando a su equipo abajo por un punto; pero Gyenongdong Do le aplicó un 5-0 a Rabb para consolidar una ventaja que ya no perderían.
Aaron Szilagyi intentó meter a Hungría en la pelea en el último turno y aunque ganó 8-5 a Sanguk Oh, fue el medallista individual el encargado de darle el punto definitivo. Corea del Sur domina hoy por hoy la esgrima mundial.
En la batalla por el bronce, Francia derrotó a Irán 45-25.
Gu Bon-Gil, la leyenda que tiene tres oros para Corea del Sur
Con 35 años, Gu Bon-Gil participó con en la final con el equipo de Corea del Sur que ganó el oro en la prueba de sable por equipo. Pero para este nativo de Seúl la sensación no le fue extraña, ya había tirado las finales de Tokyo 2020 y Londres 2012, en todas ellas ganó el oro.
El actual número 22 del mundo y miembro del Salón de la Fama de la FIE desde 2020, comenzó a entrenar esgrima en 2002. En aquel año, un entrenador lo vio jugando al fútbol y lo animó a comenzar en esgrima porque faltaban integrantes para el equipo de sable.
Aquel entrenador no se equivocó, a la fecha, Gu no solo es triple campeón olímpico, también es cuádruple campeón del Campeonato Mundial en el por equipo. Igualmente, fue abanderado de Corea del Sur en los Juegos Olímpicos de Río 2016.
