Espadistas puertorriqueñas trascienden con trabajo y esfuerzo

Dos medallas de bronce por Equipo y una medalla de plata en individual en Copas del Mundo Juvenil, es el resultado conseguido por Bianca Santa Meléndez junto a las hermanas Waller Del Valle, Alanis, Andrea y Alexandra, quienes bajo la asesoría técnica del entrenador Dorian Jiménez, se han convertido en una de las revelaciones de la esgrima puertorriqueña.

«Representar a Puerto Rico es un honor y un privilegio que nos llena de orgullo, ya que somos conscientes de que estamos siendo modelos a seguir para las jóvenes que comparten el sueño de representar a la isla en el futuro», manifestó el equipo para TouchéWorld.

Las espadistas comenzaron a entrenar como equipo en el 2022, año en el que lograron el tercer lugar en la Copa del Mundo Juvenil de Costa Rica, mientras que en este 2023 volvieron a subir al podio en El Salvador, evento en el que además, Alanis Waller Del Valle consiguió la medalla de plata en la prueba individual, resultados que ubican actualmente al equipo en el puesto #22 del Ranking Mundial y a Alanis en el puesto #33 de la clasificación individual.

«La pieza clave en estos logros ha sido hacerle creer a estas atletas que sí podemos estar en el máximo nivel. De esta forma ellas se han comprometido con todo este proceso de cambios de pruebas y error, y todavía seguimos haciendo muchos ajustes», resalta el entrenador Dorian Jiménez, quien recalca que la fortaleza mental, ha sido determinante en el crecimiento y evolución del equipo.

«En el mindset ha estado la clave. Por ejemplo, en las competencias por equipo hemos tenido diferentes estrategias y ellas han respondido con mucha madurez, hasta en los momentos que he tenido que sentar a alguna y sustituirla, ellas entienden que es por el bien de todo el equipo, y ahí está el resultado».

Padres medallistas

Además del trabajo que realizan diariamente en los entrenamientos, el éxito de estas chicas es también el resultado del esfuerzo que realizan sus padres y representantes para cubrir económicamente su participación en los diferentes eventos.

«Sin duda el apoyo de los padres ha sido un gran empuje para conseguir estos logros. Ellos también son medallistas, pero desafortunadamente en este deporte hay que gastar mucho dinero para llegar a la élite», destaca Jiménez.

Para el entrenador, es importante que el equipo cuente con el apoyo que requieren para seguir trascendiendo sobre las pedanas mundiales. «Estas atletas están haciendo historia para el país. Llevan dos medallas de bronce por equipo en copas mundiales y una plata individual, esto no había pasado nunca. El país se lo merece, los padres se lo merecen, la federación se lo merece y las atletas seguirán soñando y trabajando. El apoyo de la federación es clave para que cosas mayores puedan pasar».

Ahora, el Equipo Femenino Juvenil puertorriqueño se prepara para participar  en el venidero año 2024 en el Campeonato Panamericano Cadete y Juvenil de Brasil  y el Campeonato Mundial Cadete y Juvenil de Saudí Arabia, sin embargo, para ello deben recaudar fondos que les permitan cubrir con los costos de la participación.